Everyprop.com

Inmobiliaria de Lujo

  • Inicio
  • Propiedades
    • Comprar
    • Madrid Capital
    • Madrid Zona Norte
    • Madrid Zona Noroeste
  • Inmobiliaria Madrid
    • Ofrecer su propiedad
    • Oficinas y Contacto
  • Blog Inmobiliario Lujo
+34-91-123-6002
Everyprop.com

Inmobiliaria de Lujo

  • Inicio
  • Propiedades
    • Comprar
    • Madrid Capital
    • Madrid Zona Norte
    • Madrid Zona Noroeste
  • Inmobiliaria Madrid
    • Ofrecer su propiedad
    • Oficinas y Contacto
  • Blog Inmobiliario Lujo
+34-91-123-6002
Descubre los dos pasos clave para lograr el éxito en cualquier área: cómo visualizar con claridad tus metas y actuar de una cierta manera.

Visualizar es el primer paso, pero no funciona si no haces lo que…

Por

88Millones

Publicado en Abundancia En junio 10, 2025

¿Cuál es la manera correcta de usar la visualización para alcanzar el éxito?

¿Sabes qué es lo que más me llama la atención cuando hablo con gente que quiere tener éxito, ya sea en los negocios, en los deportes o en cualquier cosa en la vida? Que casi todos empiezan por preguntarme qué hice, cómo lo hice, cuál fue el truco, cuál fue el secreto… Pero muy pocos se preguntan desde el principio si están dispuestos a pagar el precio.

Hoy te voy a contarte cuáles son los dos pasos clave para lograr cualquier cosa que te propongas. El problema es que la mayoría se queda en el primero paso y se olvida del segundo, que es justamente el que marca la diferencia entre visualizar y conseguir resultados reales.

Yo no voy a decirte que todo fue fácil. Pero te juro que siempre supe que iba a ganar. No porque fuera un adivino, ni porque nací con suerte, sino porque tenía (y tengo) una determinación que es casi irracional. O ganaba… o el que me ganara iba a tener que dejarse la vida para hacerlo.

Desde que tengo uso de razón, siempre fui muy competitivo. En el deporte, en los estudios, en los negocios… Siempre. Pero ojo, no competitivo desde un lugar tóxico o envidioso. Competitivo conmigo mismo. Con mis propios límites. Siempre supe que había un espacio para mi ahí arriba en el podio, y que no iba a llegar por accidente. Iba a llegar porque yo iba a pelear, iba a empujar, iba a subir escalón por escalón. Y si alguien ya estaba allá, me iba a ganar su respeto. Así de simple.

Así se avanza en el mundo de los negocios

Para mí, los negocios siempre se parecieron a esa imagen de una fila larguísima de personas esperando entrar a un sitio muy exclusivo. Al principio tú estás allá atrás, no te conoce nadie, no tienes contactos, no tienes experiencia… pero eso no importa si sabes hacia dónde vas. Cada conversación, cada propuesta que haces, cada error del que aprendes, te vas colando. Vas avanzando. Vas ocupando un lugar mas adelante. Hasta que un día, sin darte cuenta, estás adelante del todo. No por magia, sino por insistencia. Y por saber que si quieres puedes.

Para tener negocios exitosos, hay algo que aprendí rápido: no se trata solo de tener un producto o una idea. Se trata de hacer mejor, lo que otros están haciendo mal. Ahí es donde te haces un hueco. Ahí es donde rompes el mercado. No hace falta inventar la rueda. Basta con observar qué cosas están fallando los demás y tener el coraje de hacerlas mejor. Más rápido. Con más servicio. Con mayor utilidad. Con mejor infraestructura.

Y lo mismo me pasó con el deporte. Cuando jugaba, ya fuera fútbol, basket o cualquier otra disciplina, siempre había un grupo de gente con más talento natural, con más físico, con más “don”. Pero yo siempre tuve claro que si entrenaba, si me cuidaba, si estudiaba el juego, iba a alcanzar a muchos. Que si me esmeraba, podía estar, por lo menos, entre el Top 10. Si me obsesionaba con mejorar, podía competir con los mejores.

Porque todo, absolutamente todo en la vida, lo puedes lograr. Te aseguro que puedes llegar a ser muy bueno en lo que te propongas si aplicas el método y la disciplina correcta. No hay misterio ahí. Es casi ciencia.

Un punto de inflexión: la película “El Secreto”

Ahora bien, te voy a contar un punto de inflexión que cambió muchas cosas en mi forma de ver la vida: hace unos 15 años, vi una película que quizás tú también viste: Se llama “El Secreto”, de Rhonda Byrne.

Yo sé, muchos piensan que es puro marketing, frases bonitas y todo eso. Pero a mí me abrió la cabeza. ¿Sabes por qué? Porque me di cuenta de que mucho de lo que la película decía… yo ya lo estaba haciendo sin darme cuenta.

Fue como ponerle palabras a algo que yo ya venía sintiendo. Yo ya me veía exitoso antes de tener éxito. Ya me sentía empresario antes de tener mis empresas. Ya me veía fuerte antes de tener los músculos. Ya me veía feliz, pleno, realizado… antes de tener el resultado.

Entonces no solo vi la película, me compré el libro. Y después vinieron muchos más: libros sobre la Ley de la Atracción, sobre el éxito, sobre el poder del pensamiento, biografias de lideres exitosos, libros sobre psicología de lo triunfadores, sobre la profecía autocumplida. No he parado de leer durante años. Porque entendí que el juego no era solo externo, también era interno.

Y acá viene lo importante. Lo que de verdad separa a los que logran sus metas de los que se quedan por el camino.

Hay dos pasos. Y sin los dos, no hay magia. No hay resultados. No hay éxito.

Paso #1: Pensar de una cierta manera

Tú tienes que formar una imagen clara y precisa de lo que deseas. Pero no una imagen difusa, como “quiero tener libertad financiera” o “quiero ser feliz”. Eso no sirve. Todos quieren eso.

Me refiero a que tienes que ver las cosas como si ya fueran reales. Como si ya las tuvieras en tus manos. Como si vivieras en esa versión futura de ti mismo que ya logró todo.

Tú no puedes simplemente decir “quiero viajar”, “quiero tener una empresa”, “quiero ser influencer”. Eso no sirve. Tienes que verte a ti mismo facturando con tu negocio, con tus clientes satisfechos, con los emails de pedidos entrando, con la cuenta del banco subiendo cada mes.

¿Quieres ser YouTuber como MrBeast? Ok. Entonces cierra los ojos y visualiza: tus suscriptores suben por miles cada semana. Tienes tantos comentarios que no puedes contestar todos. Te llegan emails de patrocinadores. Te escriben para realizar entrevistas. Te paran por la calle y quieren una selfie contigo. Tus videos aparecen recomendados por el algoritmo todo el tiempo en todos los paises. Esa es la imagen que tienes que tener. Esa es la película que tienes que proyectar en tu mente. Una y otra vez.

Pero ahí es donde la mayoría se queda. Hacen este paso. Visualizan, hacen su tablero de visión, meditan, escribe sus objetivos, se motivan… pero no hacen el paso dos. Que es el mas importante. En un rato veremos este segundo paso.

Mi hábito diario más poderoso

Cuando estaba empezando, uno de mis hábitos más poderosos era escribir todos los días cómo me quería sentir y qué quería lograr. No era una lista de tareas, era más una especie de bitácora de visión. Me imaginaba ya viviendo lo que deseaba.

Y tú dirás: “¿Pero eso sirve para algo?” Sí. Porque cuando lo haces todos los días, tu cerebro empieza a creerlo. Tu cuerpo empieza a adaptarse. Tu yo interno se familiariza con esa frecuencia. Y tu comportamiento empieza a cambiar. Sin darte cuenta, empiezas a actuar como esa versión de ti que estás escribiendo.

Porque si no te lo crees tú… ¿quién te lo va a creer?

Paso #2: Actuar de cierta manera

Y esto, créeme, es igual o más importante que el paso anterior.

Lo que deseas está, ahora mismo, en manos de otras personas. Y tú no lo vas a recibir solo por pensarlo. Lo vas a recibir cuando hagas lo que hay que hacer para que eso llegue a ti. Y ese hacer empieza donde estás. No en un futuro ideal. No cuando tengas tiempo. No cuando llegue la motivación. No cuando veas la cosa ya a punto de llegar. Lo que tienes que hacer es aquí. Es ahora.

El pensamiento atrae. Pero la acción es lo que lo materializa.

No puedes actuar en el pasado, porque el pasado ya no existe. Tampoco en el futuro, porque este no ha llegado. Solo puedes actuar aquí y ahora, en tu ambiente actual, y con los recursos que tienes hoy.

No puedes esperar a tener tu canal de YouTube famoso para empezar a actuar como un profesional. Tienes que actuar como un profesional desde tu primer video. Desde tu primer comentario. Desde tu primer seguidor. Y esa acción coherente es la que te pone en frecuencia con el resultado.

¿Estás en un trabajo que no te gusta? Bien. Entonces no esperes a que llegue el trabajo ideal para actuar con excelencia. Actúa con excelencia ahora. Haz tu trabajo actual de la mejor manera posible incluso si tu visualización es conseguir otro trabajo. Esa es la actitud que te abre las puertas.

Cada día puede ser un éxito o un fracaso. Así de simple. Si la mayoría de tus días terminan siendo éxitos, vas a construir el camino hacia lo que visualizaste. Pero si la mayoría de tus días son un fracaso, entonces no hay visualización que te salve. No vas a lograr nada.

Por ende dentro de cada día, cada acto puede ser también un éxito o un fracaso. Si la mayoría de los actos que haces cada día son exitosos —es decir, te acercan a lo que quieres y los haces correctamente— ese día fue un éxito. Si tus actos mayoritarios son un fracaso o no te acercan a lo que quieres lograr, tu dia habrá sido un fracaso.

Y si tienes más días exitosos que fracasados, eventualmente vas a estar viviendo tu visualización.

El verdadero poder: actuar con visión

Ahora, mucha gente me dice: “Es que no tengo tiempo, estoy cansado, tengo problemas, no tengo contactos, no tengo capital…” y créeme, he escuchado todas las excusas del mundo. Pero al final, todo se resume en una sola cosa: ¿estás dispuesto a hacer hoy lo que tienes que hacer, aunque no tengas ganas, aunque no veas resultados inmediatos, y aunque nadie te aplauda todavía?

Porque ahí está el verdadero poder. En actuar con visión. En que cada cosa que hagas hoy esté impregnada del futuro que deseas. Cada email que mandas, cada video que editas, cada conversación que tienes, cada libro que lees… todo tiene que llevarte un paso más cerca.

Y si además, mientras haces cada acto, mantienes tu visión clara en la mente, esa imagen poderosa de lo que vas a lograr, entonces ese acto no solo será efectivo, sino también será fuerte. Porque tendrá un motor emocional detrás. Y un acto fuerte empuja mucho más que un acto tibio.

Mira, yo no nací con todo resuelto. A mí nadie me regaló nada. Pero siempre tuve eso: una visión nítida de a dónde quería llegar, y que era imposible no llegar finalmente. Y cada vez que me caía —porque sí, me caí muchas veces— me levantaba con más hambre. Con más claridad. Con más decisión.

Hay mucha gente que está todo el día ocupada, haciendo cosas, corriendo de un lado a otro, pero no avanza ni medio paso hacia lo que realmente quiere.

Están ocupados, pero no están enfocados. Hacen mucho, pero nada con intención. Y eso, créeme, es como estar en una cinta de correr: estás sudando, estás cansado, pero sigues en el mismo lugar.

Preguntas incómodas que cambian tu dirección

Sincerate contigo y pregúntate: “A ver, ¿qué quiero realmente? ¿Dónde quiero estar en cinco años? ¿Qué tipo de vida quiero tener? ¿Qué tipo de persona quiero ser?” Y esas preguntas, aunque incómodas, te ayudaran a recalibrar. A alinearte. Porque no se trata de hacer más. Se trata de hacer mejor.

Hay algo curioso que pasa cuando tú te comprometes de verdad: el universo te pone a prueba. No para fastidiarte. Sino para ver si hablas en serio. Te va a poner obstáculos, sí. Pero también te va a dar señales. Te va a dar oportunidades. Te va a poner personas en el camino. Y tú decides si las ves… o las dejas pasar.

Yo aprendí que la acción disciplinada, sostenida en el tiempo, termina venciendo a cualquier adversidad. Es cuestión de resistir más que los demás. De durar más. De seguir cuando los otros se rinden. Porque el éxito, al final, es un juego de resistencia.

Y claro, tienes que adaptarte. No te estoy diciendo que hagas siempre lo mismo aunque no funcione. No, para nada. La clave está en seguir caminando hacia tu visión, pero ajustando el rumbo cuando sea necesario. Si un camino se cierra, buscas otro. Si una estrategia no sirve, la cambias. Pero la visión, esa no se negocia.

Yo he cambiado de rubro, de proyectos, de estrategias… pero nunca de destino. Porque sé quién quiero ser. Y todo lo que hago cada día está al servicio de ese objetivo.

Volvamos un segundo al ejemplo del deporte, porque ahí se ve más claro: tú puedes tener el mejor plan de entrenamiento, los mejores suplementos, el mejor equipo… pero si no entrenas todos los días, si no te levantas cuando no tienes ganas, si no te cuidas en la comida, si no te exiges cuando el cuerpo te pide parar… no vas a mejorar.

Y exactamente igual en los negocios, en el desarrollo personal, en cualquier meta grande que tengas.

La clave no es lo que pasa, sino lo que haces

Te quiero contar algo más personal: hubo una etapa en mi vida en la que ya había alcanzado ciertos logros. Tenía negocios que funcionaban, una rutina sólida, cierto reconocimiento… y sin embargo me sentía estancado. ¿Sabes por qué? Porque me había olvidado de visualizar lo siguiente. Me había quedado demasiado cómodo en lo que ya había conseguido.

Ahí entendí que esto no se acaba nunca. Que el crecimiento es constante. Que siempre hay una nueva cima. Y que si dejas de imaginar, dejas de actuar con propósito. Y cuando dejas de actuar con propósito… empiezas a retroceder por dentro.

Entonces volví a los fundamentos. Volví a visualizarme, pero ahora con nuevos desafíos. Me vi liderando nuevos proyectos, impactando a más personas, viajando a lugares donde todavía no había estado, hablando en escenarios más grandes, entrenando mi cuerpo a un nuevo nivel, aprendiendo cosas que no dominaba.

Y esa visión renovada fue el combustible para seguir. Para reinventarme.

¿Sabes qué me ayudó mucho también? Rodearme de personas que pensaban igual. Porque tu entorno es un reflejo de ti mismo. Si tú estás rodeado de quejas, de negatividad, de mediocridad, es casi imposible elevarte. Pero si estás con gente que cree en sí misma, que actúa, que se supera, te contagias.

Y acá no hablo solo de amistades físicas. Hablo de a quién sigues en redes, qué contenido consumes, qué libros lees, qué podcasts escuchas. Todo eso forma tu entorno mental. Y ese entorno mental define tu nivel de energía, tu motivación, tu visión.

Entonces, si hoy estás viendo este video, pregúntate: ¿qué estás visualizando cada día? ¿Tu mente está llena de metas y sueños, o de preocupaciones y quejas? ¿Y tus acciones? ¿Están alineadas con lo que quieres lograr, o solo reaccionas a lo que el día te trae?

Porque esto es clave: la diferencia entre un día exitoso y uno perdido no está en lo que te pasa, sino en lo que tú haces con lo que te pasa.

Y seamos realistas. No todos los días vas a tener ganas. No todos los días vas a tener la claridad. No todos los días vas a ver resultados. Pero si logras que la mayoría de tus días estén orientados hacia tu visión, vas a ganar. Sin importar de dónde vienes, cuántos contactos tienes, o cuánta plata hay en tu cuenta hoy.

Es una acumulación de actos exitosos, como te decía antes. Es como una cadena. Cada eslabón te conecta con el siguiente. Y cada uno depende de ti. No del gobierno, no de tu familia, no de la economía. Solamente depende de ti.

Y sí, habrá días malos. Días en los que sientes que retrocedes. Días en los que nadie te entiende. Días en los que todo sale mal. Pero mientras no sueltes tu visión, mientras sigas actuando aunque sea un poco, sigues avanzando.

Y al final, cuando mires hacia atrás, vas a ver que todos esos actos —grandes o pequeños— fueron construyendo el camino.

Ya lo decía Steve Jobs

Como dijo Steve Jobs, en su discurso de graduación en Stanford en 2005:

“No puedes unir los puntos mirando hacia adelante; solo puedes unirlos mirando hacia atrás. Así que tienes que confiar en que los puntos se conectarán de alguna manera en tu futuro.”

Cada acción, decisión o experiencia, por insignificante que parezca en el momento, contribuye a construir el trayecto de nuestra vida. Al mirar atrás, podemos ver cómo esos “puntos” se conectan, formando un camino que nos ha llevado hasta donde estamos hoy.

Y otra cosa: no te compares. Sé que esto es difícil, sobre todo ahora que las redes nos muestran la vida perfecta de todo el mundo. Parece que todos tienen más dinero, más viajes, más seguidores, más éxito… y tú te sientes como si fueras el único que no lo está logrando.

Pero eso es una trampa. Porque nadie muestra sus días malos. Nadie sube una historia diciendo: “Hoy me sentí un fracasasado”. Nadie hace un post contando que le rechazaron un proyecto. Todos mostramos el 10%. Lo lindo. Lo que brilla. Pero detrás de cada éxito hay un montón de noches sin dormir, decisiones difíciles, dudas, fracasos, y eso no se ve en los otros.

Entonces deja de compararte y compárate contigo mismo. ¿Dónde estabas hace un año? ¿Hace tres años? ¿Qué lograste desde entonces? ¿Qué mejoraste? ¿Qué aprendiste? Ahí está el progreso real. En TU evolución constante. No en la foto perfecta.

Y si hoy sientes que no avanzaste tanto como querías, no te castigues. Solo pregúntate: “¿Qué puedo hacer diferente mañana? ¿Qué acto pequeño pero exitoso puedo sumar? ¿Cómo me puedo alinear un poco más con mi visión?”

Porque esa pregunta, repetida cada día, es la que cambia vidas.

Conclusión: por qué siempre me fue bien

Hoy te conté cómo siempre me fue bien en los negocios y también en los deportes. No porque haya tenido suerte, sino porque tuve determinación. Porque me vi ganando antes de empezar. Porque cuando me metí en la fila, supe que iba a llegar adelante, aunque tuviera que empujarme con los codos si era necesario.

Aprendí a observar a los que lo hacían mal, y a hacerlo mejor. Aprendí a no esperar condiciones ideales para actuar. Aprendí a entrenar más que los otros. A ser disciplinado. A tener paciencia. A visualizar con locura y a ejecutar con frialdad.

Vi El Secreto, leí sobre la Ley de la Atracción, la profecía autocumplida, la mente de los exitosos. Y entendí que no alcanza con soñar. Que también hay que moverse. Que pensar de cierta manera es el primer paso, pero actuar de cierta manera es lo que lo vuelve real.

Así que si tú quieres resultados, crea primero la imagen. Hazla vívida, clara, poderosa. Y luego empieza a actuar con más días exitosos que fracasados, como si ya fuera cierto. Porque, te lo digo por experiencia: cuando eso se alinea, lo que deseas… empieza a buscarte.

Y cuando lo tienes frente a ti, no es casualidad. Es consecuencia.




Propiedades en Venta

Destacado
Chalet de lujo en venta en Las Rozas, Madrid - Ref: EP-31606
Ver propiedad

Chalet de lujo en venta en Las Rozas, Madrid – Ref: EP-31606

Everyprop Inmobiliaria de Lujo Las Rozas Madrid, presenta chalet de…

Habitaciones
7
Baños
7
Área
990 m2
*Venta

1,790,000€

Destacado
Mansión Lujo Moraleja Madrid. A continuación piso en el soto de la moraleja venta chalet madrid camino ancho moraleja.
Ver propiedad

EP-31364 Mansión de Lujo en La Moraleja Madrid

Inmobiliaria de Lujo en La Moraleja, presenta mansión de alta…

Habitaciones
10
Baños
11
Área
1800 m2
*Venta

10,000,000€

Blog Inmobiliario Lujo

  • Barrio Jerónimos Madrid: Una Joya Inmobiliaria Frente al Retiro
  • Barrio Argüelles Madrid: La Joya Inmobiliaria de la Capital
  • Visualizar es el primer paso, pero no funciona si no haces lo que…
  • Por qué Invertir en Bienes Raíces: Multiplica tu Patrimonio
  • Cómo Generar Ingresos comprando y vendiendo inmuebles de lujo
  • RE/MAX Jumbo: Experiencia Inmobiliaria de Lujo en Madrid
  • Olisson Club: Inmobiliaria de Lujo con Propiedades Exclusivas
  • Ciudad Jardín Madrid: Lujo y Estilo de Vida Exclusivo en la Capital
  • Barrio Mirasierra Madrid: Elegancia y Confort
  • Barrio Nueva España Madrid: Inversión inmobiliaria de alto nivel
Everyprop.com

/Las casas más lujosas de Madrid.

Enlaces Rápidos

  • Inicio
  • Madrid Capital
  • Madrid Zona Norte
  • Contacto
  • Madrid Zona Noroeste
  • Portal Inmobiliario
  • Políticas De Privacidad

Ubicaciones

Pozuelo de Alarcón La Moraleja Madrid Zona Norte Centro Madrid Capital Malasaña / Universidad Ciudalcampo Área de Santo Domingo/ Ciudalcampo Encinar de los Reyes Salamanca Hortaleza Conde Orgaz / Piovera Madrid Zona Noroeste Moncloa Chamartin Área de La Moraleja Castellana Recoletos

Blog Inmobiliario Lujo

Abundancia Inmobiliarias de Lujo Barrios de Lujo Inversión

Características

Áticos de lujo en Madrid centro Comprar piso de lujo en Madrid Inmobiliaria de lujo en Madrid Casas exclusivas en Madrid Agencias inmobiliarias de lujo Madrid Propiedades de lujo en Madrid Viviendas de alto standing en Madrid Pisos premium en Madrid Inmuebles de lujo Madrid Chalets de lujo en Madrid capital

© 2000-2025. Todos los derechos reservados.

|

Poseer una casa es la piedra angular de la riqueza... tanto la riqueza financiera como la seguridad emocional.

Suze Orman
junio 14, 2025 sábado!
Everyprop.com
  • Ingresa en
¿Olvidó la contraseña?